LÁCTEOS Y DIETA ANCESTRAL

I. Lácteos en la Dieta Carnívora

Los lácteos son biológicamente diseñados para el crecimiento rápido de los mamíferos. Aunque son nutricionalmente densos y aportan proteínas altamente biodisponibles, calcio, K2, yodo y grasas, su composición puede enviar señales de crecimiento que son contraproducentes para un adulto que intenta quemar grasa y revertir la resistencia a la insulina.

Las fuentes identifican cuatro mecanismos principales por los cuales los lácteos pueden detener el progreso en una dieta carnívora:

1. Respuesta Insulínica y Crecimiento (IGF-1)

El factor crucial es la señalización de crecimiento:

  • Lactosa (Azúcar): La lactosa es un carbohidrato compuesto de glucosa y galactosa. Su consumo provoca un aumento del azúcar en la sangre y, consecuentemente, un pico de insulina.

  • Suero (Whey): Las proteínas de suero son de rápida absorción y son sorprendentemente insulinogénicas. El suero puede aumentar la insulina incluso cuando la ingesta de carbohidratos es baja. Cuando la insulina se eleva, empuja la energía hacia el almacenamiento y detiene la movilización de la grasa corporal.

  • IGF-1 (Factor de Crecimiento similar a la Insulina): Este factor puede aumentar con el consumo de lácteos. Si bien esto es útil en niños en crecimiento o en la recuperación atlética, una señal constante de crecimiento en un adulto que busca revertir la resistencia a la insulina es contraproducente. El aumento de IGF-1 e insulina también puede exacerbar problemas de la piel como el acné o el eczema.

2. Antojos y Adicción (Hiperpalatabilidad)

Los lácteos son inherentemente "adictivos" o hiperpalatables, lo que impulsa el consumo excesivo de calorías (sobrealimentación):

  • Casomorfinas: La caseína (la proteína principal de la leche) se digiere lentamente y se fragmenta en péptidos llamados casomorfinas, que se unen a los receptores opioides. Estos péptidos, como la beta-casomorfina 7, contribuyen a la adicción y a los antojos.

  • "Jackpot de Palatabilidad": Los lácteos combinan grasa, proteína y azúcar, que es la combinación de sabor más placentera en la naturaleza. Esta combinación hace que sea fácil consumir energía en exceso sin sentirse saciado, lo que se traduce en un consumo excesivo de calorías y un posible estancamiento de la pérdida de peso.

3. Problemas Digestivos e Inflamación

La intolerancia a la lactosa y las proteínas de la leche son comunes:

  • Intolerancia a la Lactosa: Aproximadamente el 65% de la población mundial deja de producir la enzima lactasa después del destete. La lactosa no digerida pasa al intestino grueso, donde las bacterias la fermentan, causando gases, hinchazón, reflujo y heces blandas o diarrea.

  • Caseína A1/A2: La caseína A1 (común en la mayoría de los lácteos convencionales) podría ser menos adaptada para el consumo humano que la caseína A2, lo que sugiere que los lácteos de cabra u oveja (que contienen A2) podrían ser mejor tolerados.

  • Pasteurización y Aditivos: La pasteurización puede desnaturalizar las proteínas, haciendo que el sistema inmunológico las reconozca como extrañas y provoque una respuesta inflamatoria. Además, muchos productos lácteos procesados (queso, crema agria) contienen aditivos, estabilizadores y espesantes que pueden irritar el intestino.


II. Protocolo del Dr. Tony Hampton: Prueba de Eliminación y Reintroducción

El Dr. Tony Hampton recomienda que, si la pérdida de grasa se ha estancado, los antojos son fuertes o hay síntomas persistentes (congestión, acné, reflujo o hinchazón), se debe realizar una prueba para diagnosticar si los lácteos son la causa.

Este protocolo se lleva a cabo en dos fases, manteniendo la base carnívora (carne, huevos, sal, agua) durante todo el proceso:

Fase 1: Ayuno Total de Lácteos (14 Días)

El objetivo es una eliminación estricta para permitir que el metabolismo se "reinicie".

  1. Eliminación Completa: Retirar todos los lácteos.

  2. Uso de Ghee: Se permite el uso de ghee (mantequilla clarificada) para cocinar, ya que está casi libre de lactosa y caseína.

  3. Monitoreo y Seguimiento: Rastrear métricas clave diariamente, lo que incluye:

    • Peso matutino.

    • Medida de la cintura.

    • Glucosa en ayunas (si se tiene medidor).

    • Hambre antes de las comidas (en una escala de 1 a 10).

    • Notas sobre antojos, congestión, estado de la piel y calidad del sueño.

Fase 2: La Escalera de Reintroducción Controlada

Después de las dos semanas de limpieza (asumiendo que los síntomas han mejorado), se reintroduce un solo tipo de lácteo cada tres o cuatro días, siguiendo un orden específico de menos a más problemático:

Escalón

Tipo de Lácteo

Notas de Tolerancia

1

Ghee (Mantequilla clarificada)

Generalmente el mejor tolerado, ya que elimina proteínas y azúcar.

2

Mantequilla (Butter)

El siguiente mejor tolerado.

3

Quesos duros y añejos

Suelen tener menos lactosa.

4

Crema espesa (Heavy Cream)

Debe medirse y considerarse de categoría ocasional.

5

Yogur griego natural (sin azúcar)

Generalmente más difícil de tolerar.

6

Proteína de Suero (Whey Protein)

Es la más insulinogénica.

Si la báscula se detiene, los antojos aumentan, o los síntomas regresan en cualquier "escalón", el Dr. Hampton sugiere que has encontrado tu umbral de tolerancia personal.


Reglas Prácticas para el Consumo de Lácteos (Zona de Amigos de la Pérdida de Grasa)

Si los lácteos son bien tolerados y no causan estancamiento, el Dr. Hampton recomienda estas pautas prácticas:

  1. Medición: Si consumes crema, debes medirla y no servirla libremente (free pour). Los quesos deben medirse en onzas, no en bloques (bricks). Mantener la ingesta de lácteos en torno al 10-15% de las calorías diarias.

  2. Timing del Suero: Si usas proteína de suero para ganar músculo, consúmela después del entrenamiento, cuando los músculos son más sensibles a la insulina. Fuera de esa ventana, prioriza el bistec y los huevos.

  3. Evitar la Noche: Evita los lácteos tarde por la noche, ya que la elevación de insulina y la vía mTOR a la hora de acostarse no apoyan la quema de grasa.

  4. Formas Preferidas: Usa las formas menos insulinogénicas y menos desencadenantes, como el ghee (nivel superior) o la mantequilla (tratarla como condimento, no como un grupo alimenticio).

  5. Peores Formas: La leche es generalmente la menos amigable debido a su carga de lactosa. El helado y los dulces lácteos viven en la categoría de "capricho raro".


Descargo de responsabilidad: Este contenido es educativo y no constituye asesoramiento médico. Para obtener orientación personalizada sobre cualquier aspecto de la salud, consulta con un profesional de la salud cualificado.


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